A
todas las víctimas de la guerra
les
debemos
la
paz.
Es
justo y necesario recordarlo
No
es honesto disfrutar de la paz
-ni posible vivir en paz-
si
lo olvidamos.
La última consecuencia
y
uno de los peores desastres de la guerra
es
que los supervivientes se olviden
de
las víctimas inocentes de uno u otro bando.
Todas
ellas pertenecen ya
al
mismo bando de la paz
y
quienes
lo olvidan al de la guerra y la
injusticia.